- Editorial:
- MORATA
- Any d'edició:
- 2001
- Matèria
- Psicologia
- ISBN:
- 978-84-7112-467-8
- Pàgines:
- 240
- Col·lecció:
- VARIAS
HUMANA MENTE
POZO
PRIMERA PARTE: La psicología cognitiva del procesamiento de información. La revolución cognitiva: Cuando la energía se convierte en información. Las parejas de hecho de la psicología cognitiva. Sistemas y niveles de análisis cognitivo. Más allá del procesamiento de información: El mundo, la conciencia y la carne. La mente encarnada. El contenido de las representaciones . La mente explicitada: La conciencia de las representaciones. La mente socializada: La cultura en las representaciones mentales. TERCERA PARTE: La construcción mutua de la mente y la cultura. La reconstrucción cultural de la mente encarnada. A modo de epílogo: Escenarios sociales para la reconstrucción de la mente.
En su libro "El hombre que confundió a su mujer con un sombrero", Oliver Sacks cuenta que, cuando presentó a ese paciente agnóstico un guante, lo definió como una superficie continua plegada sobre sí misma. Parece que tiene cinco bolsitas que sobresalen, pero era incapaz de dar sentido a ese objeto, de verlo como un guante. A diferencia de usted, esa persona agnóstica era incapaz de conocer, es decir de relacionar humana/mente el mundo, la conciencia y la carne, y por tanto también de sentir inquietud ante un guante con seis bolsitas.
Una agnosia similar ha padecido el sujeto de la psicología cognitiva, capaz de procesar información abstracta, desencarnada, pero incapaz de generar conocimiento a partir de ella. La llamada revolución cognitiva pretendió reducir la mente humana a un código binario simple, un procesamiento de información que la situó en un universo plano, digital. Frente a ello, este libro nos sugiere volver humana/mente al mundo analógico, tridimensional, habitado por personas, y por guantes, con sus significados y sus deseos, supone no sólo humanizar la psicología cognitiva sino repensar su desarrollo reciente.
Pero sólo podemos conocer ese mundo analógico que habita nuestra mente a través de las representaciones encarnadas que nos proporciona el cuerpo y cuyo significado debemos redescribir no sólo por procesos de explicitación consciente, que convierten esas representaciones en verdadero conocimiento sino, sobre todo, por la mediación de objetos culturales, de sistemas culturales de representación, que amplían nuestro horizonte cognitivo al tiempo que humana/mente nos reconstruyen. Es en esa difusa frontera entre el mundo, la conciencia y la carne, donde debemos hacer una psicología del conocimiento, que, más allá de la psicología cognitiva clásica, se ocupe de la construcción mutua entre la