Francisco Satué ofrece, de manera exhaustiva y particular, el relato de la trayectoria biográfica y profesional de esta fulgurante figura del rock, cuyos principios en la música no fueron fáciles y que estuvo a punto de dejarlo todo para hacerse monje budista. Pero consiguió la fama en 1969 con una canción, "Space Oddity", basada en el film de Kubrick "2001: Una odisea del espacio". En los años 70 su éxito fue ya imparable. Este londinense polifacético no sólo ha grabado algunos de los álbumes más famosos e importantes de la historia del rock, sino que también ha protagonizado algunos de los films más sobresalientes de la historia del cine ("The Man Who Fell to Earth", "Merry Christmas, Mr. Lawrence" y "Labyrinth").