La concesión del premio Nobel de la Paz a Muhammad Yunus y al Grameen Bank ha supuesto un espaldarazo definitivo a la idea de que es posible combatir la pobreza en el mundo desde un banco privado y que los microcréditos son una iniciativa social capaz de cambiar el destino de millones de personas. Yunus ha revolucionado el universo de la ayuda humanitaria y la concepción tradicional de la banca gracias a la creación y el desarrollo del Grameen Bank. Fundado en 1976 a partir de un préstamo inicial de 27 dólares repartido entre 42 personas, se ha convertido hoy, gracias a la determinación ética de Yunus, en una organización que concede pequeños créditos -en total millones de euros cada año- a personas desfavorecidas, con especial atención a las mujeres, para poner en marcha iniciativas empresariales que permitan a una familia o a una cooperativa comprar tanto la materia prima como la maquinaria necesaria para empezar una actividad económica. Así ha quedado demostrado que muchas veces es la falta de acceso a una financiación, por pequeña que sea, lo que impide a los pobres mejorar su situación. Para llevar a cabo este extraordinario reportaje, David Bornstein ha recorrido Bangladesh, ha entrevistado en profundidad a Muhammad Yunus, y ha conversado con economistas que trabajan en temas de desarrollo, emprendedores sociales, activistas de ONG y, por supuesto, con los beneficiarios de esta iniciativa social que, poco a poco, se ha ido convirtiendo en una esperanza real. La actividad diaria del Grameen Bank, reconocida por la Fundación Nobel, es un impresionante ejemplo de cómo pueden encontrarse soluciones originales y efectivas a problemas sociales.