El autor, especializado en geografía económica y geografía política, y concretamente en el análisis de las relaciones sociales y el espacio geográfico, efectúa en esta obra una rigurosa reflexión acerca de la geografía humana como ciencia y de su relación con los procesos económicos y sociales. En la medida en que se atribuya al espacio geográfico -soporte de toda la actividad humana- la consideración de variable de la realidad, la aprensión de sus leyes debe erigirse en centro de atención científica de la que cabe esperar una aportación racional y objetiva al cuerpo de la ciencia. Y todo ello implica descubrir las relaciones de interconexión de los factores que lo forman, así como determinar su lógica interna, debiendo evidenciarse, como corolario, el papel de las relaciones sociales como mecanismo estructurante colectivo sobre el espacio. En la primera parte se presenta una perspectiva en geografía humana, poniéndose el énfasis en la defensa de su cientificidad, hasta alcanzar una articulación del espacio coherente con la estructura social. La segunda parte recoge una serie de aspectos o mecanismos sociales fundamentales en la articulación del espacio geográfico. En la tercera se formula una propuesta de síntesis para el estudio de espacios delimitados, basada en el papel esencial de la actividad económica como dinámica territorializadora, y se ofrece como caso ejemplificador el papel territorializador de un sector de actividad económica de fuerte impacto espacial -la actividad turística de litoral-, muy válido para estudiar una gran variedad de efectos. Por último, en la cuarta parte, se analiza la relación entre el espacio y la innovación tecnológica, proponiendo una matriz de análisis para el estudio de las nuevas tecnologías con efectos espaciales, dadas las fuertes implicaciones futuras que presentan.
